Al principio de emprender, siempre quería encontrar a alguien con quien ir, pero luego, algunas personas se quedaron atrás y continué mi camino solo.

Después, algunas personas querían irse conmigo, pero ya no quería irme con ellos.
Solo quiero caminar solo, porque sus corazones no son lo suficientemente fuertes, no pueden entender cómo elegir cuando se enfrentan a decisiones sobre la naturaleza humana en el proceso de hacer las cosas.
Más tarde, comprendí que ir solo es lo mejor, lo más rápido y lo más prometedor.
No te unas a otros a la ligera; al final, solo encuentro a personas que no necesitan compañía, todas han atravesado la oscuridad solas y son una unión de fuertes. En este momento, los compañeros tienen un verdadero significado.
Cuanto más lejos camina una persona, menos personas pueden seguirle. Ya sea leer, hacer ejercicio o ganar dinero, es lo mismo.
A medida que tu nivel aumenta, tu sistema de conocimientos se enriquece y tu personalidad se perfecciona, las personas que están en la misma frecuencia que tú serán cada vez menos. Esta es la ley del 80/20, no, ahora es la ley del 90/10, algo que no se puede cambiar.