Pinta un cuadro de un mundo donde la política monetaria predecible reemplaza los experimentos de tasas de la Fed, y Bitcoin se convierte en una red y sistema de pagos global. Los tesoros colapsan, la economía keynesiana se desvanece, y los una vez confiables pilares de los bonos y bienes raíces se desmoronan.
A medida que las monedas fiduciarias y las stablecoins luchan por sobrevivir, los multimillonarios realizan el cambio: migran su riqueza a las criptomonedas. La era de la impresión ilimitada de dinero llega a su fin. Bitcoin, argumenta Balaji, se convierte en el “gobierno de los gobiernos”, un protocolo neutral por encima de los estados-nación.
Pero la victoria no significa seguridad. Advierte sobre ataques, resistencia regulatoria y la necesidad de que los ciudadanos elijan jurisdicciones que respeten los derechos de propiedad. De esta turbulencia, surgen nuevas comunidades: estados de red construidos sobre valores compartidos, digitales primero, opcionales en cuanto a fronteras.
Su llamada final es simple pero urgente: conferencias, escuelas y constructores deben ahora esbozar el siguiente plano para la civilización. La victoria de Bitcoin, según Balaji, no se trata solo de dinero, sino de rehacer el mundo.
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¿Qué pasa cuando Bitcoin gana? - Brave New Coin
Pinta un cuadro de un mundo donde la política monetaria predecible reemplaza los experimentos de tasas de la Fed, y Bitcoin se convierte en una red y sistema de pagos global. Los tesoros colapsan, la economía keynesiana se desvanece, y los una vez confiables pilares de los bonos y bienes raíces se desmoronan.
A medida que las monedas fiduciarias y las stablecoins luchan por sobrevivir, los multimillonarios realizan el cambio: migran su riqueza a las criptomonedas. La era de la impresión ilimitada de dinero llega a su fin. Bitcoin, argumenta Balaji, se convierte en el “gobierno de los gobiernos”, un protocolo neutral por encima de los estados-nación.
Pero la victoria no significa seguridad. Advierte sobre ataques, resistencia regulatoria y la necesidad de que los ciudadanos elijan jurisdicciones que respeten los derechos de propiedad. De esta turbulencia, surgen nuevas comunidades: estados de red construidos sobre valores compartidos, digitales primero, opcionales en cuanto a fronteras.
Su llamada final es simple pero urgente: conferencias, escuelas y constructores deben ahora esbozar el siguiente plano para la civilización. La victoria de Bitcoin, según Balaji, no se trata solo de dinero, sino de rehacer el mundo.