La esencia de las finanzas es el flujo de energía, y Huma está transformando la "energía estática" que está bloqueada en "energía cinética instantánea".

Los economistas suelen decir que el capital es la sangre de la economía moderna.
Pero si se mira desde otro ángulo, el capital se asemeja más a una forma de energía: impulsa el funcionamiento de las empresas, motiva el consumo de los hogares y mantiene el orden social.
El problema es que esta energía no se está utilizando de manera eficiente.
Los plazos contables hacen que los fondos permanezcan inactivos durante largos períodos, los pagos transfronterizos mantienen la riqueza atrapada en la intermediación, y los retrasos en el pago de salarios diluyen el valor del trabajo de los trabajadores con el tiempo. A nivel mundial, billones de dólares de energía están atrapados en los espacios intermedios del sistema.
El significado de Huma Finance radica en que: intenta liberar esta energía reprimida, permitiendo que los fondos realmente operen en forma de "energía cinética".