El cierre del gobierno de Estados Unidos entra en cuenta regresiva, la publicación de datos económicos clave se verá obstaculizada.

El 30 de septiembre, menos de 48 horas antes de la fecha límite del 1 de octubre para el cierre del gobierno de EE. UU., Trump se reunió con los líderes de ambas cámaras del Congreso, pero no se logró avanzar en los temas que los demócratas exigían, como la extensión de las subvenciones de salud y la cancelación de los recortes al programa de Medicaid incluidos en la legislación fiscal que Trump firmó a principios de este año. El vicepresidente Pence declaró que el gobierno de EE. UU. "está avanzando hacia un cierre", y si no se llega a un acuerdo, cientos de miles de empleados públicos se enfrentarán a la suspensión de salarios, y la publicación de datos económicos clave también se verá obstaculizada. Pence trató de culpar a los demócratas. "Creo que estamos avanzando hacia un cierre porque los demócratas no están dispuestos a hacer lo correcto, espero que cambien de opinión, estaremos atentos." El líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, dijo después de la reunión: "Si el presidente puede aceptar algunas de nuestras demandas, podrá evitar el cierre, pero todavía existen enormes diferencias entre nosotros. Creemos que estos temas sobre atención médica y la cancelación de fondos están en línea con la voluntad del pueblo estadounidense." El líder de la mayoría republicana en el Senado, John Thune, dijo que la negativa de los demócratas a aprobar un proyecto de ley de gastos a corto plazo para mantener al gobierno funcionando hasta el 21 de noviembre es equivalente a "tomar rehenes", pero también indicó que continuará negociando con los demócratas después de la fecha límite de financiamiento actual. El cierre del gobierno de EE. UU. retrasará la publicación de indicadores económicos clave (incluido el informe mensual de empleo no agrícola programado para el viernes) y al menos temporalmente llevará a que cientos de miles de empleados federales no reciban salario, mientras que otros empleados gubernamentales deberán continuar prestando servicios básicos sin pago. La Oficina de Estadísticas Laborales de EE. UU. anunció el lunes que no se publicarán datos económicos durante el posible cierre. Trump amenazó con que si el gobierno se cierra, despedirá a gran escala de forma permanente a empleados federales. Si el cierre se materializa, sería el primero desde 2018-2019, cuando el financiamiento del gobierno se interrumpió durante cinco semanas durante el primer mandato de Trump, incluyendo el período de Año Nuevo.