El 29 de septiembre de 2025, el caso de blanqueo de capital de Bitcoin más grande del mundo, muy esperado, volverá a ser juzgado. Esta batalla legal ha estado en curso durante casi un año, desde que se llevó a cabo la primera audiencia en el Tribunal Penal de Southwark en Londres el 21 de octubre de 2024, y el desarrollo del caso ha sido notable.

La figura central Qian Zhimin (también conocida como Zhang Yadi o Huahua) negó rotundamente todas las acusaciones ilegales en su contra por parte de la fiscalía británica durante la primera audiencia, incluyendo los cargos de blanqueo de capital utilizando Bitcoin. En la próxima audiencia, su abogado Roger Sahota continuará adoptando una estrategia de defensa de no culpabilidad, insistiendo en la negación de todas las acusaciones de blanqueo de capital y afirmando enérgicamente que los Bitcoins confiscados por las autoridades no son ganancias del crimen.

La identidad de Qian Zhimin y la enorme cantidad de Bitcoin que controla han suscitado un amplio interés. Ella es la controladora real de una empresa llamada Blue Sky Gery. Esta compañía fue fundada en marzo de 2014, con un capital registrado de 30 millones de yuanes, y aparentemente es una empresa de tecnología. Sin embargo, en realidad, la compañía ha lanzado varios productos de "inversión a corto plazo", atrayendo a inversores mediante la promesa de altos rendimientos.

Estos productos de inversión afirman tener tasas de rendimiento anual asombrosamente altas, que oscilan entre el 100% y el 300%, superando con creces el nivel de retorno de inversiones normales. Por ejemplo, uno de los productos afirma que al invertir 100,000 yuanes, solo se necesitan 30 meses para obtener cerca de 400,000 yuanes de retorno. La empresa incluso utiliza el lema "Tú das a Ge Rui tres años, Ge Rui te devuelve tres generaciones de riqueza" para atraer a los inversores.

A medida que avanza el juicio, todos los sectores de la sociedad están siguiendo de cerca cómo se desarrollará este caso que involucra una gran cantidad de Bitcoin, así como su posible impacto profundo en la regulación de las criptomonedas a nivel global.