¿Esta tendencia de Ethereum no ha hecho que muchos empiecen a cuestionarse la vida?

Primero echemos un vistazo a los datos de liquidaciones. En el rango de 2850-2900, se acumularon contratos de largos por 66,16 millones de dólares. ¿Qué significa esto? Cada vez que el precio rebota en esa zona, se produce una oleada de liquidaciones forzosas que empujan el precio a la baja, formando una zona de presión vendedora natural. Los grandes operadores tienen esto muy claro, por lo que este rango es prácticamente el "matadero" de los largos.

Mirando más abajo, en torno a 2700-2750, las liquidaciones son claramente escasas. En zonas con soporte débil, las caídas suelen ser implacables. Si no se mantiene la línea defensiva en 2780, el siguiente objetivo será 2650.

¿Y en el aspecto técnico? En el marco de cuatro horas, aparece una divergencia bajista de triple conjunción — el precio alcanza nuevos máximos, pero los indicadores muestran debilidad. Tras la muerte del cruce MACD, las barras verdes siguen alargándose, lo que indica que el impulso bajista no ha agotado su fuerza. Aunque el RSI ya está en zona de sobreventa, no hay una divergencia alcista en el fondo, lo que sugiere que las órdenes de rebote están en modo espera. La banda de Bollinger se expande hacia abajo, el precio se desliza pegado a la banda inferior, una característica típica de una caída unidireccional.

El volumen también revela mucho: durante las caídas, el volumen aumenta notablemente, mientras que en las subidas se reduce a niveles lamentables. Esta relación entre volumen y precio evidencia una falta grave de presión de compra. Todas las medias móviles están en orden bajista, y los 2900 ya se han convertido en una resistencia en lugar de soporte.

El panorama fundamental tampoco es alentador. La salida constante de ETH en ETF de Estados Unidos, y la preocupación creciente por las regulaciones, afectan el mercado; el valor total bloqueado (TVL) en protocolos DeFi( está en descenso, la actividad en la cadena disminuye, las tarifas de Gas se mantienen en niveles bajos a largo plazo, y la demanda claramente está débil; las tasas de staking también están bajando, lo que reduce el atractivo de staking en Ethereum.

¿Entonces qué hacer?

Si tienes posiciones en spot, se recomienda cortar pérdidas y esperar si el precio cae por debajo de 2780; en torno a 2650, puedes considerar dividir en pequeñas posiciones para probar. Los traders de derivados pueden intentar hacer cortos en el rango de 2850-2900, con un stop-loss por encima de 2950. Solo cuando el precio supere con volumen los 2950 y se estabilice, se podrá considerar que el fondo posiblemente se ha formado.

Ethereum en estos momentos está en un punto de inflexión clave. 2850 es la línea de vida o muerte para los toros y los osos; mientras no mejore claramente el entorno macroeconómico, cualquier rebote puede ser solo una ventana para reducir posiciones. En condiciones extremas del mercado, preservar el capital es mucho más importante que intentar comprar en el fondo ciegamente.