Las acciones de Oracle siguen siendo castigadas. Esto es lo que está impulsando la venta:

Para empezar, los inversores están cada vez más nerviosos por la exposición de Oracle a OpenAI. La asociación parecía atractiva sobre el papel, pero la ecuación riesgo-recompensa ya no convence al mercado.

Luego está el cambio de tendencia más amplio. El dinero está rotando fuertemente hacia empresas que realmente poseen su propia infraestructura de IA, como Google. Estos actores tienen balances sólidos y vías más claras para monetizar sus apuestas en IA. ¿Oracle? Ellos están gastando dinero prestado para subirse a la ola de la IA. Es un perfil de riesgo completamente diferente.

Y por último, todo el sector tecnológico está enfrentando vientos en contra relacionados con los activos de duración. Cuando los tipos de interés se mantienen elevados, las empresas de alto crecimiento con retornos a largo plazo simplemente ya no salen igual de rentables.

La presión vendedora no afloja. Los mercados están revalorizando lo que realmente significa la exposición a la IA para los diferentes modelos de negocio.