Siempre hay alguien que me pregunta: ¿por qué no hago orden corta? ETH ha caído tanto desde su punto más alto, ¿no es una forma de ganar dinero fácil?

La verdad es que yo también lo he pensado. Abrir una orden corta de 100 millones de dólares en el nivel de 12600 y luego quedarme tranquilo esperando a recibir el dinero — suena muy bien.

Pero tengo un defecto: cuando me comprometo con algo, lo persigo hasta el final.
Realmente me gusta este círculo, me encanta esa sensación. Las criptomonedas han cambiado mi vida, así que en el fondo soy un optimista. Tal vez en el próximo ciclo pueda aprender a manejar ambas cosas, pero ahora? Aún no lo he entendido.

Solo quiero ganar un poco de dinero para vivir en el campo en el que soy bueno, no quiero caer en agujeros que no conozco.

Recientemente he estado revisando el mercado y también redescubriendo a mí mismo.
Espero que nadie se deje influir por esos detractores—haz lo que mejor sepas hacer, tenemos tiempo de sobra. Espera a que llegue el momento adecuado para actuar, no tienes que explicar nada a nadie, ni demostrar nada.

En este período, he vuelto a abrir órdenes, principalmente porque he visto que Grayscale y BlackRock han comenzado a moverse, además de esperar un beneficio inicial en términos de políticas.

La cuenta grande fue bloqueada, planeo esperar a que realmente toque fondo para invertir todo en el gran ciclo. Ahora esta cuenta pequeña es puramente para sentir el ritmo del mercado y jugar un poco.
Soy consciente: aunque solo tenga 10,000 dólares de capital, siempre que tenga suficiente paciencia y no me emocione, también puedo obtener buenos rendimientos en este mercado.

Hacer trading de criptomonedas se reduce a tres cosas: tiempo, espacio, eventos.
Primero establece la dirección general de esta etapa, luego evalúa el rango de fluctuación de cada criptomoneda, y ajusta la proporción de las posiciones de manera flexible según los eventos imprevistos.
La razón es simple, pero hacerlo es realmente difícil.

En la última ola perdí mucho, el cadáver todavía está en la lista de liquidaciones de un intercambio, jajajaja es un poco gracioso pero también es una lección dolorosa.

¡Y hay un punto fatal: no te emociones demasiado!
Los grandes que he visto caer en liquidación todos mueren de la misma manera: por la emoción. Tal vez esa sensación era demasiado emocionante, ¿verdad? Recordando agosto del año pasado, arriesgué entre setenta y ochenta millones de dólares en ETH, ahora que lo pienso, si no muero yo, ¿quién muere?

Si me equivoqué en mi juicio, no hay nada más que decir, ¡simplemente lo merezco!
El mercado nunca se equivoca, solo nosotros nos equivocamos.