Una imagen para entender la fuerza agotada de los compradores y el colapso de la tendencia en la formación de doble techo (techo en "M")

La formación de doble techo es una figura de reversión bajista que aparece al final de una tendencia alcista. Está compuesta por dos máximos aproximadamente iguales y un mínimo intermedio (línea de cuello), con forma de la letra “M”.

• Primer techo: continuación de la tendencia alcista, los compradores marcan un nuevo máximo, pero luego surge toma de beneficios y el precio retrocede formando el mínimo intermedio.

Segundo techo: los compradores intentan reanudar la subida y atacan de nuevo. La clave está en que el precio no logra superar eficazmente el máximo anterior (o solo lo supera brevemente antes de retroceder rápidamente), lo que indica que no hay nuevo capital dispuesto a comprar a precios más altos: la fuerza compradora se agota.

Ruptura: el sentimiento de decepción se propaga, el precio cae por debajo del mínimo intermedio (línea de cuello), los stops de los compradores se activan y la caída se acelera.

Criterios estrictos de confirmación

Condición previa: debe existir una tendencia alcista clara antes de que se forme la figura.

Requisito de los máximos: ambos máximos deben ser de altura similar. Si el segundo máximo es notablemente inferior al primero, la señal bajista es aún más fuerte.

Confirmación de la línea de cuello: la línea horizontal trazada desde el mínimo del retroceso intermedio es la línea de cuello.

Precaución con las rupturas falsas: el segundo techo suele presentar una larga mecha superior que supera brevemente el máximo anterior antes de retroceder rápidamente; esto es una fuerte trampa alcista.

Momento para salir/ponerse corto:
Agresivos: intentar una posición corta ligera cuando aparezcan velas claramente bajistas en el segundo techo (como una estrella fugaz o envolvente bajista), buscando una alta relación riesgo/beneficio.

Conservadores (recomendado): esperar a que el precio rompa la línea de cuello de forma efectiva antes de abrir cortos.

Nivel de stop-loss: situado por encima del máximo del doble techo.

Objetivo de beneficio: medir la altura vertical desde el techo hasta la línea de cuello y proyectar la misma distancia hacia abajo desde el punto de ruptura.