Hay un debate interesante en curso sobre cómo deberían las empresas contabilizar los chips de Nvidia y la infraestructura de IA en sus balances. La controversia se está intensificando, pero, sinceramente, algunos críticos quizá estén llevando sus argumentos un poco demasiado lejos esta vez.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
21 me gusta
Recompensa
21
6
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
SandwichHunter
· 12-10 01:22
Los que venden las palas siempre ganan más; los problemas contables, en cambio, son asuntos menores.
Ver originalesResponder0
PretendingSerious
· 12-09 02:54
¿Cómo se calcula la contabilidad de los chips? En resumen, simplemente quieren depreciar más para pagar menos impuestos.
Ver originalesResponder0
LowCapGemHunter
· 12-08 14:54
Joder, ¿de verdad pueden discutir tanto por un problema contable? Da igual, que lo resuelva un algoritmo, tarde o temprano habrá que redefinir esto de los activos.
Ver originalesResponder0
MagicBean
· 12-08 14:54
Joder, ¿de verdad es tan complejo este tema de la contabilidad? Ya deberían haber unificado los estándares.
Ver originalesResponder0
gm_or_ngmi
· 12-08 14:47
Eh, ¿no es para tanto? ¿De verdad es tan complejo el tema contable? ¿No basta con soltar el dinero y comprar los chips directamente?
Ver originalesResponder0
AirdropHunterXM
· 12-08 14:27
Vaya, el tema del tratamiento contable, de verdad que hay gente que lo complica demasiado. Un chip es solo un chip, ¿no? Al final, cómo gestionarlo depende de la situación de cada uno, no hace falta convertirlo en un gran escándalo...
Hay un debate interesante en curso sobre cómo deberían las empresas contabilizar los chips de Nvidia y la infraestructura de IA en sus balances. La controversia se está intensificando, pero, sinceramente, algunos críticos quizá estén llevando sus argumentos un poco demasiado lejos esta vez.